Tiempo nos ha costado integrar el hecho que mente y corazón pueden dialogar. Bendita sea nuestra mente que nos permite conocer y comprender el mundo en que vivimos. Sin embargo, es tiempo de revisar cuáles son los paradigmas, valores y creencias que hoy modelan tu forma de ver el mundo, puesto parece que están más enfocados en el “deber hacer y cumplir” que simplemente en ser. ¡Ni lo pienses!, ya no hay justificación para seguir postergándote, es necesario que adecues tu estructura de pensamiento y marcos de creencias a tus necesidades actuales. Has crecido y evolucionado, pero te estás desgastando por tratar de hacer calzar tu nuevo yo en un marco que ya quedó obsoleto.